A la pregunta: ¿Por qué es buena la Chía? La respuesta está clara desde las civilizaciones antiguas que veían las semillas de chía como altamente nutritivas, una creencia que está respaldada por la ciencia moderna.
Además de apoyar la pérdida de peso, ser altamente nutritivas y reducir los niveles de azúcar en la sangre, las semillas de chía pueden reducir el riesgo de sufrir enfermedad cardiaca. Conozca a fondo todas las propiedades y beneficios para su salud.
1. Las semillas de chía son altamente nutritivas.
Históricamente, en las civilizaciones azteca y maya, usaban las semillas en sus dietas, así como con fines medicinales, rituales religiosos y cosméticos. Las civilizaciones antiguas veían las semillas de chía como altamente nutritivas, una creencia que está respaldada por la ciencia moderna. De hecho, dos cucharadas de semillas de chía contienen proteínas de buena calidad, grasas saludables, fibra y minerales como calcio, hierro, magnesio, fósforo, zinc, sin mencionar las vitaminas B y los ácidos grasos omega 3, amigables para el corazón.
2. Las semillas de chía están cargadas de antioxidantes.
Las semillas de chía también son una excelente fuente de antioxidantes, que no solo evitan que las grasas en las semillas de chía se enrancien, sino que también benefician la salud humana al neutralizar las moléculas reactivas conocidas como radicales libres, que pueden dañar los compuestos celulares y contribuir al envejecimiento y enfermedades como el cáncer.
3. las semillas de chía apoyan la pérdida de peso.
La fibra y la proteína en las semillas de chía pueden beneficiar a aquellos que intentan perder peso. Dos cucharadas de semillas de chía tienen cerca de 10 gramos de fibra dietética. La mayor parte de la fibra en las semillas de chía es fibra soluble, absorbe agua y se expande en su estómago para ralentizar su digestión y ayudarlo a sentirse lleno después de una comida, por tanto, comería menos.
4. Las semillas de chía pueden reducir su riesgo de enfermedad cardíaca.
La fibra soluble, el tipo que se encuentra principalmente en las semillas de chía, puede ayudar a reducir el colesterol total y LDL (malo) en la sangre. A su vez, esto reduce su riesgo de enfermedad cardíaca.
5. Las semillas de chía contienen muchos nutrientes óseos importantes.
Las semillas de chía son ricas en varios nutrientes que son importantes para la salud ósea, incluyendo calcio, fósforo y magnesio y ALA. Todos estos nutrientes se han relacionado con la mejora de la densidad mineral ósea.
6. Las semillas de chía reducen los niveles de azúcar en la sangre.
El consumo de semillas de chía puede ayudar con la regulación del azúcar en la sangre, posiblemente debido a su contenido de fibra y otros compuestos beneficiosos.
7. Las semillas de chía son fáciles de incorporar a la dieta.
Las semillas de chía son increíblemente fáciles de incorporar a su dieta. Tienen un sabor bastante neutro, por lo que se pueden agregar a casi cualquier cosa. No es necesario molerlos, cocinarlos o prepararlos de otra manera, lo que los convierte en una adición útil a las recetas. Se pueden comer crudos, empapados en jugo o agregados a avena, pudín, batidos y productos horneados. También puede espolvorearlos sobre cereales, yogur, verduras o platos de arroz. Además, hacen maravillas en buñuelos caseros como agente aglutinante. Dada su capacidad para absorber agua y grasa, puedes usarlos para espesar salsas y como sustituto del huevo. También se pueden mezclar con agua y convertir en un gel. Una recomendación de dosificación común es de 20 gramos o aproximadamente 1.5 cucharadas de semillas de chía dos veces al día tres veces en una semana. Recuerde beber mucha agua para prevenir cualquier efecto secundario digestivo.